El reciente caso de un niño que sufrió la picadura de un alacrán ha alertado a la población sobre el riesgo y la posible proliferación de estos arácnidos. Según catedráticos en toxicología de la UBA, los más expuestos al veneno de los alacranes son los niños y los ancianos, ya que es mucho más difícil que un adulto tenga una reacción grave.
 
El Ministerio de Salud de la Nación ha difundido una serie de recomendaciones para reconocer las especies peligrosas y, principalmente, para evitar el ingreso de las mismas a los hogares lugar dónde se producen la mayoría de los casos.

Para evitar su aparición se recomienda:

• Revisar y sacudir prendas y calzados. - Sacudir la ropa de cama antes de acostarse o acostar a un bebé o a un niño. -  Tener precaución cuando se examinan cajones o estantes. - Evitar caminar descalzo en zonas donde se conozca la presencia de alacranes.

PROTECCIÓN DOMICILIARIA

En lo referente a la protección domiciliaria es aconsejable:

• Instalar rejillas sanitarias en desagües de ambientes y sanitarios. - Controlar las entradas y salidas de cañerías, aberturas y hendiduras. - Colocar burletes o alambre mosquitero en puertas y ventanas. - Revocar paredes, reparar grietas en pisos, paredes y techos. - Realizar control de cámaras subterráneas, cañerías, sótanos, huecos de ascensor y oquedades de las paredes.

Asimismo se recomienda llevar a cabo un aseo cuidadoso de las viviendas y alrededores, realizar un control de la basura para evitar la proliferación de insectos, y evitar la acumulación de materiales de construcción, escombros, leña y hojarasca. No realice la limpieza de estos últimos espacios con las manos porque son lugares donde los alacranes se mantienen, conservan y dispersan.

¿QUÉ HACER EN CASO DE UNA PICADURA?

• No realizar tratamientos caseros.
• Aplicar hielo.
• Concurra rápidamente al médico,
• En lo posible lleve el alacrán para ser identificado.

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