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De acuerdo a los profesionales, el 80 % de las personas que la sufren no lo saben. Limita seriamente las actividades, tiene un fuerte impacto físico y emocional, e interfiere en las tareas diarias. Su principal causa es el humo tabaco, pero puede prevenirse.
La EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) designa a varias dolencias que limitan el normal flujo de aire a los pulmones como consecuencia de la reacción inflamatoria del organismo ante estímulos nocivos como el humo del tabaco u otros gases. Es potencialmente fatal. Por su naturaleza crónica no es reversible y se manifiesta, en la mayoría de los casos, con falta de aire e infecciones.
CLASIFICACIÓN Y SÍNTOMAS
La EPOC designa principalmente a dos enfermedades cuyos nombres, si bien ya en desuso, resultan más familiares.
Bronquitis crónica: se caracteriza por una tos prolongada y gran cantidad de secreciones mucosas en las vías respiratorias principales.
Enfisema: implica la destrucción de los alvéolos pulmonares, en donde se lleva a cabo la absorción de oxígeno y la eliminación del dióxido de carbono, y el pasaje de este primer gas a la sangre.
La mayoría de las personas con EPOC tienen una combinación de ambas afecciones. Los síntomas se presentan lentamente, y es posible que algunos individuos no sepan que tienen la enfermedad. Los signos más comunes son: disnea, tos (con o sin flema), fatiga, sibilancias, (dificultad para respirar) y repetitivas infecciones respiratorias.
FACTORES DE RIESGO
La causa principal de la EPOC es el humo del tabaco, casi en al totalidad de los casos afecta a fumadores. Cuanto más fume una persona, mayor probabilidad tendrá de desarrollar esta enfermedad. Además, el humo de segunda mano también es considerado un factor de riesgo importante.
En menor medida, pueden favorecer su aparición la contaminación del aire exterior, la exposición a productos químicos, polvos, vapores, irritantes y gases.
¿CÓMO DETECTARLA?
El estudio más utilizado para detectar la EPOC es la espirometría, un examen muy sencillo en el que, mediante la inhalación y la exhalación, un equipo mide la capacidad pulmonar. También, en una radiografía de tórax se pueden ver signos que pueden advertir al médico la presencia de enfisema pulmonar.
Esta afección no se cura, pero el tratamiento puede retrasar su progresión. Cuanto antes se diagnostique, y se adopten hábitos saludables, mejor será la calidad de vida de la persona afectada.
PREVENCIÓN
El no fumar previene casi la totalidad de los casos de EPOC, junto con la creación de ámbitos saludables y la reducción de factores de riesgo. Consulte con el especialista para que lo informe acerca de los tratamientos existentes para abandonar el cigarrillo.
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